hispanistas vs. indigenistas
por Ariel Rolfo *
El 12 de Octubre suele tener distintos y contrapuestos significados en América.
Para algunos es el Dia de la Raza o de la Hispanidad donde se valoran los lazos históricos con la potencia colonizadora, su legado cultural y civilizatorio.
Para otros el 12 de octubre fue rebautizado como el Dia del Respeto a la Diversidad Cultural considerándolo un día de reflexión histórica y diálogo intercultural en el marco del reconocimiento y respeto hacia los pueblos originarios.
Esto ocurre porque existe en Latinoamérica una dicotomía Hispanismo-Indigenismo confrontativa desde lo político ideológico donde, desde mi punto de vista, ninguna de las dos visiones son las adecuadas para tomarlas como paradigma de acción política en nuestra realidad contemporánea colonial y en particular para movimientos políticos americanos emancipadores cuyo objetivo es la liberación nacional o aun para un pueblo del tercer mundo que busca su soberanía política, económica y cultural plena.
Adoptar como una cuestión fundamentalista existencial esta dicotomía seria tomar una disidencia secundaria legitima existente en sectores de la sociedad argentina y americana como la contradicción fundamental a resolver por el país lo cual generaría confrontaciones internas que no contribuirían en absoluto para el objetivo central de unificar el accionar político en función de la contradicción principal que padecemos que es… Patria o Colonia, Liberación o dependencia.
Si bien creo que existió la Leyenda Negra de la colonización española (algo promovido por su oponente el Imperio Ingles) también es cierto que existieron abusos y opresión en la colonización española, como así también existió abusos y opresión de pueblos aborígenes contra otros pueblos aborígenes americanos como en el caso del Imperio Azteca o el Imperio Inca.
Siempre el imperialismo o el colonialismo o la opresión de pueblos es condenable profese quien lo profese y haga quien lo haga.
También es cierto como dicen algunos sustentadores de los beneficios de la colonización europea que cuando pueblos más avanzados en la faz política, económica, científica y tecnológicamente subyugan colonialmente otros pueblos llevan a esos territorios avances en esos campos que genera una transformación de esos territorios a estadios civilizatorios más avanzados en esos aspectos (No culturalmente ya que no hay culturas superiores a otras) pero estos avances civilizatorios usufructuados posteriormente por pueblos colonizados no justifica la opresión política, la imposición de modelos económicos, el sometimiento y la explotación o directamente aniquilación de los pueblos nativos.
Respecto al Indigenismo podemos decir que más allá del legitimo respeto por todos los habitantes y colectivos humanos existentes en una nación, hay que ser cuidadosos con la cuestión del indigenismo y los Pueblos Originarios.
Hace ya más de dos siglos que el Imperialismo en particular el Británico viene utilizando distintas estrategias, una de las cuales es la promoción del indigenismo fundamentalista para generar artificialmente divisiones internas el países sobre los que llevan adelante su guerra hibrida permanente y su proyección geopolítica para después lograr particiones territoriales funcional a sus intereses.
También partir del siglo XX el colonialismo de los poderes globales viene utilizando maniqueamente legislaciones del derecho internacional y resoluciones de la ONU para generar artificiosamente “pueblos nuevos” ,para que después si es conveniente generar secesiones internas en el territorio.
Por ejemplo se pueden promover estados Plurinacionales para posteriormente por el principio de la Autodeterminación de los Pueblos los Estados Nación puedan ser fragmentados (Caso de levantamientos del Oriente Boliviano).
O también se puede generar instancias como el referéndum de Malvinas de 2013 donde los pobladores de las islas pidieron la autodeterminación, derecho que solo es legítimo en el caso de los pueblos coloniales y no para los pobladores de un territorio usurpado en disputa por su soberanía.
En todos los casos el objetivo es la fragmentación política social para posteriormente generar una secesión territorial y destruir el Estado Nación existente. El fundamentalismo Indigenista solo es una herramienta más de esta estrategia neocolonial cuyo objetivo es crear estados chicos y más débiles para posteriormente negociar o someterlos con mas facilidad. Sigue la lógica política o la máxima de Nicolás Maquiavelo…”Divide y Reinaras” algo en lo que el Imperialismo Británico es superlativamente eficiente.
El colonialismo británico agita la cuestión del indigenismo para poder articular en algún momento esa estrategia geopolítica, en particular en el sur argentino sobre el la Patagonia.
Esta estrategia es complementaria de la usurpación de las islas del atlántico sur y su proyección a la Antártida.
Por ello sería importante definir que no son lo mismo los pueblos aborígenes que los pueblos originarios actuales. Todos somos descendientes de alguien, pero en la actualidad con mayor o menor mestizaje de razas *todos los argentinos nativos somos el Pueblo Originario de esta región* los cuales tenemos los mismos derechos y obligaciones por estar organizados como Nación una de cuyas definiciones es: “Comunidad social con una organización política común con un territorio y órganos de gobierno propios, que es soberana e independiente políticamente de otras comunidades”
Por otra parte los argentinos somos un Pueblo que es un término que puede ser ambiguo pero que sirve para designar a la población que vive un lugar, región o país, que comparte quizás en su seno una composición originaria heterogénea pero que fue conformando a lo largo de la historia una cultura general propia que les da una identidad comunitaria y un objetivo común como Pueblo.
También podemos decir que todos somos partes de la misma Patria que es la tierra natal o adoptiva ordenada como nación, a la que se siente ligado el ser humano por vínculos jurídicos, históricos y afectivos.
El Estado Nación es una forma de organización política de una nación que cuenta con poder administrativo y soberano sobre una determinada zona geográfica. Esta organización política se constituye en un determinado territorio y tiene el poder de ordenar y administrar la vida en sociedad. Por otra parte en estado democrático como la Argentina el Pueblo es el sujeto político portador de la soberanía nacional entendida como soberanía popular, es el verdadero soberano.
Hay que estar atento a la fragmentación política secundaria bajo la dicotomía secundaria Hispanismo/Indigenismo o a cualquier intento secesionista de socavar la unidad nacional, la integridad territorial y el Estado Nación con la cuestión del Indigenismo.
Es indispensable proclamar y hacer efectiva la igualdad de derechos políticos, sociales y económicos de todos los argentinos donde a partir de allí, mas allá de las heterogeneidades existentes dentro de la población, no tendrá incidencia política futura quienes fueron nuestros ancestros, nuestras procedencias étnicas sino que sin resquicios seremos un Pueblo, un Territorio, una Nación y un Estado.
Seremos un Pueblo y una Patria unificados en la busca de su destino de grandeza, en busca de la Felicidad del Pueblo y la Grandeza de la Nación.